viernes, 31 de enero de 2020

Después de las nevadas

Tras dejar pasar unos días después de la gran cantidad de nieve que cayó en Arcos de las Salinas tocaba dar una vuelta de reconocimiento a ver el estado de las instalaciones y rellenar comederos porque en estas duras condiciones ambientales toda ayuda que les demos a las aves es poca para resistir el frío invernal de Teruel.
Las temperaturas han cambiado radicalmente, de estar bajo cero prácticamente todo el día ha tener estos últimos dos días temperaturas mínimas sobre cero y al mediodía llegar hasta unos increíbles 16 grados.
Esto ha generado un deshielo muy acelerado con lo cual decido aventurarme hasta los hides para ver su estado aunque debido a la gran cantidad de nieve caída no las tenía todas conmigo.
El primer hide que visito es el de las vacarizas, camino despejado (el asfalto tiene esas ventajas) hasta llegar al desvío de la pista que sube al hide, toca dejar allí el coche y subir andando. Nada mas poner comida (mezcla de alpiste y tenebrios) la presencia de pájaros es constante y alguno de ellos llama poderosamente la atención, aves que están presentes en esa altitud en los meses primaverales ya estaban allí : currucas rabilargas, colirrojos tizones y tarabilla común, son especies que pasan el invierno en la península ibérica pero es raro encontrarlos a 1600 mts en pleno mes de enero
Tarabilla europea (Saxicola rubicola)

Curruca rabilarga (Sylvia undata)




Colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros)


Pero la gran protagonista de este hide es el Águila real (Aquila chrysaetos) no llevaba ni 20 minutos en el observatorio y ya tenía al macho piando encima del caseto. Pronto bajó a buscar su pitanza





Tocaba ya abandonar este hide para poder cubrir las necesidades de los otros observatorios y dado que los ventisqueros de nieve eran muy abundantes presagiaba que la subida a los hides de la isilla y el navajo podrían estar complicados. Y las predicciones se cumplieron, la llegada hasta el de la isilla no tuvo más problemas pero a partir de ahí el camino era impracticable, periódicas acumulaciones de nieve impedían poder seguir así que tocaba dar la vuelta y visitar el hide del huerto, habrá que esperar a la próxima semana para poder visitar el del navajo.
En el hide del huerto prosiguen las especies habituales; a pesar que mi estancia allí fue breve, apenas hora y media que aproveche para comer, la entrada de aves fue constante.
Aquí el que me sorprendió fue el agateador europeo (Cethia brachydactyla) que pensaba que era un insectívoro estricto y lo descubrí introduciendo su largo pico en las ranuras del comedero para extraer las semillas del alpiste.












 
   

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Unos días en los aguardos 4birding.

Cuestiones familiares me llevaron a viajar hacia Castellón hace unas semanas y una vez resueltas pude dedicar algo de tiempo a visitar algun...